Novela negra "Cuando cae la oscuridad sobre Londres"

CUANDO CAE LA OSCURIDAD SOBRE LONDRES

(SINOPSIS)

"Cuando cae la oscuridad sobre Londres" es una novela plagada de interesantes y siniestros personajes que discurren por las calles de Londres unos días antes de los Juegos Olímpicos de 2012. Al detective de Scotland Yard, Joseph Grammer, le espera una difícil tarea después de que aparezcan una serie de personas asesinadas en extrañas circunstancias. Todas las pistas se diluyen entre importantes Presidentes de ONEG's, Jefes de Sectas Satánicas o psicópatas presumiblemente controlados. Una novela que gira en torno a las sectas, la psicosis del fin del mundo, las tribus urbanas más ácidas y las misas negras. Francisco R. Delgado además de entretenimiento por la vía de la propia trama nos ofrece un derroche de erudición en innumerables temáticas que van solapándose a la narración de los acontecimientos.

(Sinopsis redactada por la Editorial Amarante)

La sesión de fotos

CAPITULO  9

La sesión de fotos

Jean pasó dentro de la mansión. Salió a saludarla el misterioso hombre que conoció a la salida del instituto de secundaria.

-¡Me alegro mucho de verte! No sabía si al final te presentarías.

-Hola, señor. Sí, bueno, tuve algunas dudas, pero al final me decidí a venir.

-Estupendo, está todo preparado. El fotógrafo y sus asistente te dirán lo que tienes que hacer. Si las pruebas de fotos y el vídeo salen bien redactaremos un contrato para que lo firmes tú y uno de tus padres.

-¿Un vídeo, también?

-Sí, es lo usual en estos casos. Luego se puede usar como lanzamiento en YouTube, en nuestra página web, para mostrarlo a diversas televisiones nacionales e internacionales, para mostrarlo también a los posibles clientes que deseen que tú seas su imagen de marca, o que vistas sus ropas y complementos.

-¡Oh, muy bien! Veo que lo tienen todo planeado, espero no defraudar sus expectativas.

-No lo creo, tengo un buen ojo clínico para eso.

Una mujer joven que aparentaba treinta y cuatro o treinta y cinco años se acercó a ellos. era bastante agraciada, rubia y con el pelo corto y rizado. Una ancha sonrisa cubría su boca de labios pintados de rojo y dientes perfectos y blancos.

-Jean, te presento a Margaret, Maggie para los amigos.

-Hola, Jean, encantada de conocerte. -Le dijo la elegante mujer vestida con un traje chaqueta de color rosa pálido. Ambas mujeres se dieron dos besos en sendas mejillas a modo de saludo. Luego Margaret la condujo hasta una habitación cercana.

-Acompáñame guapa, te voy a decir lo que tienes que probarte para hacer las pruebas. -Entraron en una habitación en la que había tres grandes armarios y varias estanterías llenas de ropa de todos los colores y diseños.

Novela negra "Cuando cae la oscuridad sobre Londres

CAPITULO   5

La autopsia

La misma noche de haber sido encontrado el cadáver de la joven indocumentada, cuya desaparición aún no había sido reclamada por nadie, la médico forense, la doctora Helen Cooper, llegó a las cinco y cuarenta y cinco minutos de la madrugada al depósito de cadáveres.

Aparcó su wolsvagen negro en su aparcamiento numerado y reservado en la entrada del depósito de cadáveres, salió de su vehículo, pulsó el botón de control remoto que cerraba automáticamente los seguros de las puertas, y después se dirigió a la puerta principal caminando con parsimonia. Cruzó el umbral de la puerta y saludó al guardia de seguridad.

-Buenos días, Edgar.

-¡Hola, doctora! ¿Cómo está usted?

-Muy bien gracias. Voy a cambiarme de ropa.

Se dirigió a la habitación destinada a vestidor, donde había varias taquillas, seis para los médicos y diez más para auxiliares divididas en dos compartimentos, uno para mujeres y otro para hombres. En el compartimiento de las mujeres encontró a la menuda Alicia cambiándose de ropa.

-Buenos días, Alicia.

-Buenos días, doctora, ¿cómo ha pasado la noche?

-Bien gracias, he dormido como un tronco a pesar de las noticias.

-Sí, últimamente son muy malas.

En el vestidor de hombres, Tim, el auxiliar que esa semana tenía el turno de la mañana, también estaba cambiando su ropa de calle por su uniforme impoluto de color blanco. Minutos después la doctora Helen Cooper salió del vestidor de señoras vestida con una camiseta blanca sobre la que se había colocado una bata del mismo color. Lllevaba, asímismo, unos pantalones blancos y unos zapatos blancos, tipo zuecos, abiertos por detrás. La médico forense se dirigió a la sala de autopsias, en cuyo centro había una gran mesa para hacer autopsias de acero inoxidable, que estaba brillante, perfectamente limpia y desedinfectada. La doctora encendió la luz de la sala que se iluminó con una intensa claridad. Después se dirigió a la larga bancada de mármol blanco que había pegada a la pared derecha, y sobre la que había diversos instrumentos quirúrgicos como bisturís, martillos, sierras, separadores y varios paquetes nuevos de guantes de látex. Abrió uno de ellos y se puso los guantes. Mientras tanto, Tim y Alicia habían saco el cadáver de la adolescente del cajón número quince y lo habían colocado sobre una camilla con ruedas. Minutos después ambos empujaban la camilla hasta la sala de autopsias, y situaban la camilla paralela a la gran mesa de acero inoxidable. Tim cogió el cadáver con su manos enguantadas debajo de los hombros, mientras Alicia hacía lo propio con los pies. De un solo impulso y con una sincronicidad debida a la práctica, pues ambos auxiliares eran bastante veteranos y tenían mucha experiencia, colocaron el cuerpo de la joven víctima de asesinato sobre la mesas de autopsias. Momentos después cogían la camilla y se marchaban empujándola, y dejando sola a la forense con el cadáver.

(Continuará...)

Novela negra Cuando cae la oscuridad sobre Londres

FRAGMENTO DEL CAPÍTULO 2

El cadáver desaparecido

     La médico forense Helen Cooper acudió a las ocho en punto de la mañana al depósito de cadáveres. Tenía que examinar el cadáver de la joven de raza negra, que todavía no había podido ser identificada, y que había aparecido muerta, flotando en el Támesis. En la cámara frigorífica, la forense abrió el cajón número catorce, pero para su sorpresa, lo encontró vacío. Se acercó al tablón de corcho donde había una lista con los número de los ciento cincuenta cajones, y el nombre de los pocos que estaban actualmente ocupado. En la línea del número catorce estaba escrito: "Joven negra desconocida".

     Helen Cooper llamó a una auxiliar a través del teléfono interno.

     -¿Alicia, puedes venir un momento?

     -Enseguida, doctora. -La menuda auxiliar apareció a los pocos minutos.

     -Sí, dígame doctora.

     -¿No colocasteis el cadáver de la chica encontrada en el Támesis, en el cajón número catorce?

     -Sí, entre Bob y yo lo hicimos.

     -¿Seguro? Ábrelo tú misma. -La pequeña mujer abrió el cajón nevera indicado y se quedó perpleja.

     -¡Qué raro, no está! No sé como habrá podido desaparecer. Alguien debe de haberla cambiado de sitio, aunque no se me ocurre porqué motivo.

     -Bueno, Alicia, lo mejor será que hablemos con el guardia de seguridad, la cámara interna habrá grabado lo que sucedió esta madrugada. -Ambas mujeres salieron de la cámara frigorífica, y se dirigieron hasta donde estaba el guardia de seguridad.

     -Edgar, pro favor, ¡puede enseñarnos el vídeo de la cámara frigorífica entre las cuatro y media y las ocho?

     -Sí, claro, pero para qué quieren ver eso? -Preguntó extrañado el guardia.

     -Porque un cadáver no está donde se supone que debía de estar.

     -¡Oh, Dios! ¿Cómo puede ser eso? -Se preguntó el guardia, más para sí mismo que para las dos mujeres. -Bueno, son más de tres horas, pasaré a cámara rápida el vídeo, y lo pararé en cuanto vea algo extraño. Siéntense, por favor, esto puede tardar un rato.

     

Cuando cae la oscuridad sobre Londres

Fragmento de la novela "Cuando cae la oscuridad sobre Londres"


                                            Cuando cae la oscuridad
                                            se ciernen sobre la ciudad
                                            negras sombras en la noche,
                                            se escuchan gritos lejanos
                                            de dolor y muerte en Londres



                                                    Capítulo  I

                                           A orillas del Támesis

     Cuando cae la oscuridad sobre Londres, y las sombras se ciernen sobre la ciudad, se escuchan gritos de dolor y de miedo. La muerte hace su entrada. El subinspector de New Scotland Yard, el joven Joseph Grammer telefoneó a su amigo el periodista Harry Ridell. Eran las cuatro y media de la mañana y un borracho había descubierto un cadáver flotando en las aguas del Támesis. Un coche patrulla que se encontraba haciendo su ronda nocturna fue interceptado por el vagabundo, que casi se estampó contra el parachoques del vehículo que circulaba a velocidad muy moderada.

     La víctima era una joven de raza negra, que no llevaba encima ningún tipo de identificación. La chica presentaba síntomas de entrangulamiento. No era normal que en la tranquila ciudad de Londres sucediesen cosas como aquella. No estaban en Nueva York ni en Los Ángeles, donde por desgracia, estaban más habituados a ese tipo de sucesos. Harrison, el periodista, se encontraba en esos momentos trabajando en la oficinas de su periódico, el Times. Informado por su amigo del luctuoso suceso, raudo y veloz salió del edificio donde trabajaba y se dirigió al lugar de los hechos. El subjefe de policía y el reportero de sucesos eran amigos desde la infancia, pues coincidieron en la misma clase en la escuela primaria, y luego, también en el instituto. Debido al mucho aprecio y confianza que sentían el uno por el otro, tenían un acuerdo tácito por el que se ayudaban mutuamente en su respectivos trabajos, siempre que podían. El periodista recibía la exclusiva de las noticias de sucesos, y a cambio, éste ayudaba de alguna forma a resolver algunos de los trágicos casos que aparecían de vez en cuando.

(Continuará...)

                                            

MIS 10 PELICULAS FAVORITAS

(Inicio)

Me imagino que la mayoría de los cinéfilos tiene un ranking, más o menos claro de sus diez películas favoritas de toda la historia del cine. Este es el mío particular:

1.-¡Qué Bello es Vivir!

2.-Espartaco

3.-Casablanca

4.-Blade Runner

5.-Ben-Hur

6.-Ciudadano Kane

7.-Trilogía de El Señor de los Anillos

8.-La Muerte tenía un Precio

9.-Vértigo

10.-Trilogía de Regreso al Futuro.

Esta es mi lista personal, aunque también me gustan muchas otras como las cinco películas de Las Guerra de las Galaxias, las cuatro de la serie Alien, las otras cuatro de Indiana Jones, otras tres más de las muchas y excelentes películas protagonizadas por Humphrey Bogart (aparte de Casablanca), como son El Sueño Eterno, El Halcón Maltés, y Tener y no Tener.

Otra película que me gusta mucho es Lawrence de Arabia, que estaría la onceava entre mis preferencias, y también me encanta la trilogía de Matrix, además de otros clásicos del cine como Lo que el Viento se Llevó, o El Bueno, el Feo y el Malo.

Pero era mi deseo hacer una lista corta, de tan sólo diez películas, a pesar de que seguramente hasta en una lista de cien o doscientas películas, nos seguiríamos encontrando con verdaderas joyas del séptimo arte.

Este es mi ranking, seguro que cada aficionado al cine tiene el suyo propio. Aparte de esta pequeña presentación, luego escribiré diez artículos cortos comentando y dando algunos detalles sobre esta lista de largometrages. Espero que sea de vuestro agrado.

GIOVANNI BATTISTA TIEPOLO PINTOR Y GRABADOR VENECIANO .wmv